Inspección de Trabajo sanciona a Popeye´s por vulnerar el derecho de huelga
Después de meses de espera, Inspección de Trabajo reconoce que PLK Chicken Iberia (más conocida por su mar ca de restauración moderna Popeye’s) vulneró el derecho de huelga de al menos tres trabajadores/as durante los paros parciales que se convocaron en septiembre del año pasado.
La denuncia la presentó el delegado de la sección al percatarse de que la dirección de la empresa había modificado los horarios una semana antes de que empezara la huelga, de tal forma que parte del comité de la misma y afiliados/as a la sección no pudieran secundar los paros.
Así lo recoge el resultado de la inspección resolviendo que los hechos denunciados “evidencian la intencionalidad empresarial de impedir que ejercieran su derecho a la huelga” y que “tal conducta revela la intención de la empresa de dificultar el ejercicio del derecho de huelga por parte de trabajadores que la empresa tenía expreso y escrito conocimiento que apoyaban la huelga por ser miembros del comité de esta última.”
Por todo ello se levanta acta de infracción que se traduce en una sanción a la empresa cuya cuantía podría estar entre los 30.000 y los 120.000 € y que, además, abre la puerta a la reclamación de una indemnización compensatoria por parte de la CNT-AIT.
Pero a pesar de esto, y de que consiguiéramos que la empresa arreglara las motos con las que repartíamos y nos jugábamos la vida (una de las exigencias de la sección), resulta evidente que los paros parciales que convocamos no salieron como nos hubiera gustado.
Durante el primer fin de semana fueron secundados por la mayor parte de la plantilla y el resto se tuvo que quedar de brazos cruzados al no haber repartidores/as para sacar los pedidos a domicilio ni entrar gente al local gracias a los piquetes informativos. Después de este positivo arranque, la dirección de la empresa empezó a difundir mentiras, como por ejemplo, que si la huelga seguía adelante cerraría nuestro establecimiento, nos pondría de patitas en la calle y abriría otro local a dos manzanas con una plantilla nueva y más dócil. Desgraciadamente la mentira caló. El equipo gerente hizo piña, fue embaucando, coaccionando y sobornando a quienes estaban menos convencidos/as con más horas complementarias que al resto y desde la sección no pudimos o no supimos contrarrestarlo. Los paros se fueron desinflando y la huelga llegó a su fin.
Tenemos claro que con sus errores y aciertos, el conflicto debe continuar. Quedan pendientes varias causas abiertas por reclamaciones de cantidades, despidos y vulneraciones de derechos, y la CNT-AIT seguirá peleando por arrancarle a la empresa todas las reivindicaciones de la sección sindical. Y es que, como sabemos bien, la lucha es el único camino.
Continuaremos informando.